LO CUENTO Y NO ME CREEN


"En respuesta a la promesa de libertad, 
oportunidad, justicia y libertad de religión, 
dejamos nuestras tierras nativas 
que tanto amamos para venir 
desde los rincones más lejanos 
del mundo hasta América 
y nos acomodamos en Norwalk.

 Pescamos en sus aguas, cultivamos sus campos, 
trabajamos en sus fábricas, vendemos sus productos 
y nos damos cuenta de que aquí en este hermoso lugar, 
hemos cumplido nuestras esperanzas y 
sueños para nosotros y nuestros hijos. 

Ahora unidos como un solo pueblo, 
trabajamos hacia nuestra meta de vivir 
como americanos iguales.

Dios bendiga a América y a la gente buena de Norwalk (1983)"

N O R W A L K, Connecticut, en los Estados Unidos de Norteamérica, es tierra de suelos fuertes y abundancia, en un principio, dio cabida al hombre que un día la moldeó, la mutiló y la pulió a su antojo para transformarla en su más exacta réplica de satisfacción, así mismo, como para nadie es un secreto que el paso inexorable del tiempo ha ocasionado necesariamente consecuentes alteraciones en la forma y estructura de la comunidad, debido a las condiciones que se presentan y aunque la influencia del progreso es universal, los hilos de la historia están irrevocablemente entretejidos en la tela del presente.
Norwalk es producto de su propio pasado, el presente de las condiciones socioeconómicas son atribuibles a una secuencia de eventos, a una evolución gradual del asentamiento Inglés en el siglo 17 y a una ciudad moderna de múltiples culturas y rasgos étnicos, que la hacen merecedora de elogios.

La historia de Norwalk se inicia cuando Roger Ludlow negoció la compra de la tierra india situada entre los ríos Norwalk y Saugatuck y otra compra posterior permitió la adquisición de la tierra que ahora en la actualidad, comprende la parte central y oeste de Norwalk. En 1651 esta tierra fue transferida a emigrantes ingleses que establecieron el asentamiento original para convertirse en un nuevo pueblo típico costero de Inglaterra.



Después de la ruptura política con Inglaterra en 1776, el pueblo de Norwalk hizo contribuciones muy sobresalientes a la causa de la independencia, según una autoridad de la época que dejó constancia escrita (General Bancroft), Norwalk tuvo la más alta representación proporcional en las fuerzas armadas coloniales de todas las ciudades en las trece colonias. Con el establecimiento de la independencia, Norwalk se recuperó de los daños de la guerra y volvió a su anterior patrón de estilo de vida agrario, que la había caracterizado desde un comienzo y que le había permitido alcanzar y mantener una posición económica de privilegio frente a otros lugares.

Una gran transformación de la antigua forma de vida comenzó en 1848 con la instalación de vías y adecuación de estaciones para el ferrocarril como parte de la creciente implementación del sistema vial ferroviario que avanzaba en todas las regiones, las nuevas industrias fueron apareciendo como las flores en primavera (una enseguida de la otra hasta llenar el jardín), llenas de progreso, tecnología y mucho desarrollo económico para la región y un elemento católico-irlandés que beneficiaría la fe y creencias, principalmente de los trabajadores ferroviarios y sus familias que se establecieron en Norwalk, la primera iglesia católica, cuyo edificio fue construido en la calle Chapel en el año de 1851. La revolución industrial posterior a la guerra civil intensificó el desarrollo económico local y proporcionó empleo a la nueva inmigración de europeos del centro y sur que se inició a finales del 1880, la variedad de costumbres y culturas de los grupos étnicos eventualmente se fusionaron en una corriente confluente para producir las normas sociales presentes en nuestros días.

El período de cincuenta (50) años comprendido entre 1875-1925 fue marcado por el avance tecnológico, donde el vapor y el caballo como transporte de locomoción fue reemplazado por la energía eléctrica, la producción en masa del automóvil no sólo revolucionó un medio de transporte, sino una forma de vivir. Entre muchos otros más acontecimientos, así se convirtió la actual ciudad de Norwalk evolucionando desde sus inicios como un asentamiento del siglo XVII.

Con esta agrupación de datos históricos pretendo crear conciencia sobre el pasado y avivar esa llama de pasión por la historia, para mostrar y dar testimonio con fotografías e imágenes de la época: como era el diario acontecer, como se vivía y disfrutaba de una pujante y prometedora tierra de soñadores que dieron rienda suelta a los sentimientos de sus corazones para llevar a cabo sus sueños y para resaltar los aspectos más destacados de la historia de Norwalk.

"LO CUENTO Y NO ME CREEN", por eso mejor lo escribo, está inspirada y diseñada para todos los hombres y mujeres que han emigrado de sus países natales y han optado por vivir varias décadas en este lugar para construir una nueva vida, trayendo consigo a sus hijos, para educarlos y compartir un estilo de vida mas acorde a las necesidades de cada uno, con el firme propósito de alcanzar el anhelado sueño americano de nuestra época y también, es un reconocimiento a tantos emigrantes que aportaron su grano de arena con trabajo y tesón para impulsar el desarrollo económico de su pueblo adoptivo que aunque han regresado a su tierra natal lamentablemente no han tenido la oportunidad de conocer detalles de la historia de Norwalk, por varias razones comunes.


Luis Orlando Patiño Valencia

Contenido:


BRIEN McMAHON HIGH SCHOOL


DANIEL THOMAS BARRY

ESTADO DE CONNECTICUT









REFERENCIA BIOGRAFICA

ROMANCE OF NORWALK, Elsie Nicholas Danenberg (1929).
HISTORY OF CONNECTICUT, G.H. Hollister.
NORWALK AFTER 250 YEARS, Samuel Richards Weed, compiler.
NORWALK, Rev. Charles Selleck, with supplement.
IMAGES OF AMERICA-NORWALK, Lisa Wilson Grant.
NORWALK CT, Pictures from the past, Carl Lobozza.
THE LOCKWOOD MATHEWS MANSION, Museum.
WIKIPEDIA.Org.
NORWALK, being an historical account of that Ct town, Deborah Wing Ray and Gloria P. Stewart.
AN ALBUM OF VICTORIAN NORWALK, Ralph C. Bloom, Debora Wing Ray and Gloria P. Stewart.