viernes, 14 de noviembre de 2014

PINTURAS CLASICAS

En la pintura de los siglos XVII, XVIII y primera mitad del siglo XIX había varios géneros. El género principal era la pintura histórica y reflejaba hechos sucedidos durante el pasado. El pintor componía el cuadro con su imaginación, de hecho se inventaba el cuadro, basándose en algún relato de la época que se describía, como lo vemos en el cuadro: la reunión del Consejo Municipal de París (1687), finales del siglo XVII, donde el artista pintó y decoró la sede del Consistorio, pero ocurrió un incendio en 1.793 y el cuadro original ardió.
Equiparable al género histórico estaba el género de la Pintura mitológica, el pintor se documentaba sobre una historia de la mitología y elegía una escena de dicho mito.

Veamos la escena de la obra de Torcuato Tasso, La Jerusalén liberada. En el canto XIX aparecen los personajes del cuadro y se puede comprobar, como el pintor elige los personajes, la postura, es decir, la composición que tendrá su cuadro, las luces, el ambiente, el atardecer y el paisaje de fondo. Transcurre el tiempo y se pasa al género sagrado, que fue muy empleado desde el Renacimiento.

Das Urteil des Paris (Anselm Feuerbach)
The Game of Chess (Arturo Ricci) 
Horace, Virgil and Various at the house 
of Maecenas (Charles Francois Jalabert)
Theodore Duret (Edouard Manet)
Prehistoric Man Hunting Bears 
(Emmanuel Benner)
Tarquin and Lucretia (Felice Ficherelli) 
The Children of Sir Edward and 
Dame Ann Astley (Francis Cotes) 
Apelles Painting Campaspe in the Presence 
of Alexander the Great (Jacques Louis David)
The Turkish Bath (Serkis Diranian)
Morgenspaziergang 
(Thomas Gainsborough) 
The World Before the Flood (William Etty)
(Annibale Carracci)
(Giulio Romano)
La Creación de Adán (Miguel Ángel)
Mona Lisa (Leonardo Da Vinci)